Hegemonía significa supremacía o dominio sobre otro u otros, en este caso países. Gran Bretaña ya no tiene hegemonía sobre casi nada, salvo algunos lugares puntuales como nuestras Islas Malvinas o el Peñón de Gibraltar (España). A partir del siglo XVI, con la victoria sobre la Armada Invencible española, comienza la supremacía británica sobre los mares, eso fue fundamental para conquistar regiones en América como los actuales Estados Unidos. Dicha hegemonía tuvo su mayor esplendor en el curso del siglo XIX, cuando los británicos eran poseedores de un vasto Imperio, especialmente duranmte el reinado de la reina Victoria, que fue nombrada emperatriz de la India, país en el que masacraron a mucha gente. En Asia, Africa (tráfico de esclavos), América y Oceanía había colonias inglesas por doquier. Los Estados Unidos se independizaron en 1776 pero a partir de la batalla de Trafalgar sobre Napoleón en 1805 Gran Bretaña se adueñó definitivamente de la sumpremacía en los mares y de allí se fue apoderando de distintas regiones del globo. Luego formaron el Comonwealth, comunidad de naciones que reconocen la supremacía de la reina del Rteino Unido. La idiosincracia isleña es muy particular, como vivían aislados y necesitaban materia prima para su industria se apoderaron militarmente de muchos países y cuando no lo lograron lo hicieron económicamente como el caso de nuestro país, donde el conservador ministro Roca firmó un pacto en la década de 1930 (llamada década infame) en el que llegó a decir que desde el punto de vista económico la Argentina era parte integrante del imperio inglés, por ejemplo ellos se llevaban el cuero y nosotros recibíamos los zapatos. Imagínate que la balanza comercial en esas condiciones se inclinaba abrumadoramente a su favor, además tendieron una red ferroviaria que convergía desde todo el país hacia el puerto de Buenos Aires para trasladar en sus barcos esos productos extraídos de nuestro suelo para sus industrias y luego los repartían por el mundo manufacturados.